La mente humana es imprevisible, cuando vi este vídeo me acorde de la clásica pregunta infantil de ¿que serías capaz de hacer si supieras que no se iba a saber?. Curiosa pregunta que quizás se debería hacer a todos cuantos quieren acceder a un puesto público.
El protagonista de la escena, tan modosito y formal, de repente se convierte en un verdadero compilador de los pecados capitales de la avaricia, pereza, soberbia y envidia de forma más o menos encubierta. Al final como si fuera una clásica fábula, con enseñanza incluida, su final es el justo castigo de su ciego comportamiento dejandonos en el aire el aviso... "nunca lo hagas"
¡MUY BUENO!!!!!!!
ResponderEliminarMe temo querido amigo Manuel que el comportamiento de este señor es el propio de ser humano "per sé".
La historia y el día a día nos demuestra que si no fuera por las consecuencias y el castigo o sanción consecuentes, todavía sería menos civilizados, que ya es decir.
Y si no, ya sabes aquéllo de tirar la primera piedra. No seré yo, desde luego.
Un besito
GUAUUU!!! me da miedo.... de mi!!!!
ResponderEliminarMuy bueno. Su realizador, conoce el alma humana.
un abrazote, Manuel
Hola Manuel.
ResponderEliminarNo sabes cuanto me alegra estar otra vez, con todos vosotros.
Un abrazo y estamos en contacto.
celia
Nadie nos ve, solo nosotros mismos.
ResponderEliminarLos seres humanos somos por naturaleza débiles y si encima te lo ponen tan facil....
Como dice Maru no seré yo quien tire la primera piedra.
La avaricia rompió el saco.
Un abrazo.
P.D¿se puede pedir un circulo de esos? jajajaja.
Ohhhh donde se consiguen esos papelitos????
ResponderEliminarHabía visto el video, es buenísimo. Es una situación tentadora ... jajaja, el tipo era demasiado angurriento, por eso terminó asi. Nada nos conforma nunca, siempre queremos mas y mas y mas (sobre todo si puede conseguirse asi de facil como en el video). Y es que como bien decís, somos un compendio de pecados capitales en distintas proporciones.
Un abrazo
jajajajajaja, veo que quereis un circulito igual, eh?, habrá que probar con la fotocopiadora del trabajo a ver si hay suerte jejejejejeje.
ResponderEliminarCas, muy bueno ese cambio de avatar
Maru, San, mejor dejamos las piedras en el suelo, ¿verdad?
Celia, me alegrode verte de nuevo por aqui
Any, este tipo no se merecía un circulito de esos, jejejeje
Alguien me lo mandó por mail.
ResponderEliminarSi alguno de los que lo ve no quiere tener un circulito igual, es que todavía "no se conoce a sí mismo".
Las diferencias estarían en si se coge todo el mismo día o si cada día sacamos lo necesario. Aunque ese planteamiento es difícil porque desconocemos cuanto durará el chollo. También (y es mi caso) habría quien avisaría a la familia...Pero que todos querríamos esa fotocopiadora, está claro. (Adiós a las hipotecas...)
Es una metáfora de tantas situaciones en que alguien con un poder, una oportunidad concreta la utiliza para hacer eso que no debe hacer. Y cuantas veces les sale mal, como al del vídeo, y terminan tratando de justificar lo injustificable. Como dices, cada vez que a alguien se le da una responsabilidad cualquiera debería probarse su integridad.
ResponderEliminarMuy bueno, un abrazo fuerte.
Cuando lo vi, en un correito que me mandaron, lo primero que dije, cuando se cayó el papel con el circulo negro, fue: ¡¡¡¡ JAJAJAJAAJJA BIEN, BIEN !!!!!!. Que tío, bien empleado lo tiene por agonía.
ResponderEliminarPero debo ser honrada, no pude dejar de pensar que, seria un punto (nunca mejor dicho), el que me pasara a mí.
Por cierto Manuel, que wuapo colaborador te has agenciado, seguro que teclea mas rápido que tu.
Besos perrunos
¿Qué haríamos de ser invisibles?
ResponderEliminarNadie es perfecto, Manu, ese agujero negro es una tentación, si otros roban por la cara a todas horas...y tan panchos, pues, en plan discretito. Al infeliz le faltó técnica, lo pilló sin manual.
Aflora la parte oscura, el topo negro que nos abduce, si fuera blanco en fondo negro, lo mismo.
Manu, me pregunto ¿qué haríamos sin tus interesantísimos vídeos? Es que me pones a meditar horas y horas.
Nos vemooooo a plena luz, nada de agujeritos negros.