Yo tengo un Sueño.Este Jueves un relato

Yo tengo un Sueño
El sueño de un niño

Los sueños, un concepto tan amplio como diversa es la Humanidad.
Quitando su aspecto fisiológico representan todo aquello que quisieramos lograr, que anhelamos conseguir, sabiendo que las posibilidades son escasas aunque pongamos todo nuestro empeño.
Pero a veces somos tocados por la varita de la Diosa Fortuna y alguno de esos sueños se cumplen, bien total o bien parcialmente, y en ese momento somos el ser mas feliz sobre la Tierra, da igual cuanto dure, da lo mismo cuanto hayamos tardado en conseguirlo, la sensación de satisfacción es completa.

Esta semana la frase mágica es YO TENGO UN SUEÑO, y todos tenemos, aunque algunos como yo solo los tengan despiertos, pues de los sueños dormidos nunca me acuerdo.
Los sueños de superación personal son los que me resultan más emocionantes. Últimamente han proliferado programas de televisión que dentro del puro entretenimiento dan posibilidades a personas con esos sueños, todos hemos visto en las noticias a Susan Boyle y a Paul Pott en Britain´s got Talent  pero quizás no sea tan conocida su version Coreana, The Talent Show, y uno de sus momentos estelares con la presentación de Sung Bong Choi, todo un ejemplo de superación y esfuerzo.

Vaya esta entrada en honor de los que mantienen vivos esos sueños


El Sueño de un niño





Más soñadores en la nube de PEPE

El Arte de Observar.Este jueves un relato

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Soledad aun con la presencia de varias personas que no dejan de ser un grupo de entes individuales sin aparente conexión entre ellos, y sin que parezca que haya ningún interés en establecer relaciones interpersonales.

Esa es en breves palabras la primera impresión que me causa la visión de la imagen sugerida por Matices esta semana.

Se sobreentiende que forman un grupo con un interés común, en este caso el conseguir llegar a lo alto de esa única y misteriosa escalera, hacia una luz mortecina que no parece inducir sentimientos de felicidad precisamente, escalera que además de construida con una peligrosa pendiente, por no llegar no llega ni siquiera la ventana a la que se dirige, dejando un pequeño pero profundo abismo entre ella y la pared.

A pesar de ese indudable interés común, cada personaje se ve inmerso en su individualidad, algunos parecen leer, otros mantienen una actitud de resignada espera, cada uno dentro de si mismo.

Nada en la escena indica alegría, nada parece augurar que la visión a través de la única ventana sea capaz de producir felicidad, al contrario, la afortunada sobre la cima de la lúgubre escalera mantiene una actitud de duda, ¿mereció la pena el esperar turno?, ¿Compensa dar ese salto que falta para llegar a la ventana?.... Curiosamente ninguno de los “esperantes” parece tener interés en qué efecto provoca la visión sobre la que ha logrado llegar a donde ellos quieren acceder.

La escasez de elementos accesorios potencia todavía mas el efecto hipnótico de la escalera cual totémica pirámide escalonada. La presencia del único elemento extraño, la silla, refuerza todavía más la sensación de individualidad y soledad, no parece que nadie la considere útil, nadie esta interesado en ella ni en el logotipo por evidente que sea su presencia en la sala y que parece recordar a los presentes quién es el propietario de sus deseos.

Quizás porque el ser humano es un animal gregario, quizás por su capacidad de mimetismo social, el caso es que la virtud de esperar pacientemente a que llegue el turno de cada uno supera a veces el propio fin de esa espera.

Siempre me ha parecido triste la formación de una “cola” para alcanzar algo, supone la existencia de recursos limitados ante la superior demanda de dichos recursos y establece una relación de competitividad involuntaria o inconsciente.

Colas para gestiones administrativas, colas para acceder a instituciones de todo tipo, colas para obtener recursos imprescindibles como sanidad, enseñanza, vivienda. Al final llegamos a asumir de tal forma la situación como normal, que terminamos esperando pacientemente nuestro turno para alcanzar la luz, fundiéndonos en la norma establecida al igual que los individuos de la fotografía, trasformandonos en meros fantasmas de lo que deberíamos ser.

Más sugerencias ante la imagen en la cámara de Matices

** Phantom of the Opera (Vanessa Mae)

Refranes."Persona que es curiosa tiene refrán para cada cosa".Este jueves un relato

Refranes

Cultura popular dicen que son, muestra del conocimiento sedimentado a base del tiempo y la trasmisión oral de las tradiciones. Pero dentro del refranero español hay refranes que responden a situaciones muy curiosas, refranes esperanzados en conseguir ayudas "A quien madruga Dios le ayuda", refranes nacidos en la observación de la naturaleza como aquellos tipo "En Abril aguas mil" o "Cuando Marzo mayea, Mayo marcea" e incluso proféticos "Marzo ventoso y Abril lluvioso, hacen a Mayo florido y hermoso" este último incluso rozando lo cursi, ¿Verdad? jajajajajaja.

Pero desde esa cultura popular también están los que son nacidos de la resignación, resignación de ese pueblo generalmente rural convencido de que su situación no cambiara, y así tendríamos los de tipo "No por mucho madrugar amanece más temprano", "Nada es verdad ni mentira, todo depende del color del cristal con que se mira".

Su uso esta tan extendido, tan arraigado, que a veces ni nos damos cuenta de que los usamos. Solamente saltan las alarmas cuando alguien por una u otra causa los usa con tal profusión que destaca entre los demás elementos de la conversacion.

Pero incluso ante esta situación el refranero tiene su sentencia acertada e inquisitiva: "Hombre refranero, hombre puñetero"

El aporte multimedia corre a cargo de Gabinete Caligari y su tema "Malditos Refranes"



Mas ejemplos en la enciclopédica sala de VERÓNICA